Martín Aguilar
A casi una semana de la balacera en San Andrés Mixquic, que dejó cinco personas muertas, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, anunció un operativo especial para esta zona de la Ciudad de México.
Como parte de este operativo, se instalará una base de seguridad reforzada con elementos del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional.
Durante el anuncio, pobladores de Mixquic exigieron mayor seguridad. Mientras Brugada Molina daba su discurso, fue interrumpida por la señora Iveth Ramírez, madre de una de las víctimas, quien le pidió justicia para su hijo y su sobrino, ambos abatidos en el ataque.
“Vengo sola porque mi único apoyo está en el cielo”, expresó la señora Iveth mientras sostenía la mano de la jefa de Gobierno.
“Todo el mundo conoce la clase de hijo que parí. Yo, señora, no vengo a pedirle ni a rogarle, vengo a suplicarle, a usted y a todos los que están aquí (…). No sé si fue un daño colateral de la delincuencia de este pueblo, no tengo idea, solo sé que tenía un hijo trabajador”, señaló entre lágrimas por la pérdida de su hijo el pasado domingo.
“Ahora lo ligan a una banda de narcotraficantes. No es cierto, mi hijo nunca fue narcotraficante. Le pido que me ayude y que haga una ley que se llame ‘Ley Mixquic’, para que nuestros inocentes no sean revictimizados”, solicitó la señora, visiblemente afectada.
“Hoy me dejan con las manos vacías, pero aquí estoy porque soy fuerte, porque sé qué clase de hijo eduqué. Crié un hijo trabajador y honesto”, afirmó.
Asimismo, aclaró que el lugar donde fueron acribillados no está relacionado con la delincuencia, pero enfatizó: “Es el lugar de mi familia, la casa de mi hijo, mi casa, a donde con gusto la espero cuando termine su ceremonia, y espero que se comprometa a ver el vacío que dejó mi hijo”.
Ante esto, se escuchó un “ahorita voy” por parte de la jefa de Gobierno, seguido de gritos de “¡justicia, justicia, justicia!” por parte de los asistentes. La escena tuvo lugar en la Plaza Juárez, irónicamente ubicada junto al panteón del pueblo.
La zona fue convertida en un búnker con la presencia de fuerzas de seguridad tanto locales como federales, lo que generó una sensación de intimidación entre los pobladores, visitantes y medios de comunicación que asistieron al evento.
“Hoy vengo a decirle al pueblo de Mixquic que no está solo”, afirmó Clara Brugada. De inmediato agregó: “Aquí están sus gobernantes, aquí está todo el gabinete de seguridad y paz, que hoy sesionó muy temprano en la biblioteca del pueblo”.
Continuó: “En cuanto supimos de los acontecimientos en Mixquic, al día siguiente ya estaban presentes secretarios que recorrieron el pueblo. Hoy estoy aquí con ustedes para hablar sobre seguridad y justicia social en Mixquic”.
Discussion about this post