Nancy Grajeda
El pasado jueves 25 de septiembre un pequeño grupo de habitantes de varias colonias de Tláhuac, organizados en el Movimiento Antorchista, acudieron de forma pacífica a la colonia La Turba a solicitar audiencia con la alcaldesa de esta demarcación, Berenice Hernández, en un evento que aquí se llevó a cabo, ya que las oficinas de esta alcaldía han mantenido las puertas cerradas para ellos.
Al llegar al lugar de este evento, los antorchistas fueron recibidos a golpes y patadas por un grupo de golpeadores, que dejaron a varios de nuestros compañeros heridos y a uno desmayado, quien tuvo que ser auxiliado por paramédicos para verificar su estado de salud.
El antorchismo de la Ciudad de México y del país condena enérgicamente estas prácticas abusivas y violentas, de quienes, en vez de velar por el bienestar del pueblo, lo golpean y marginan. No estamos de acuerdo en que las autoridades ejerzan abuso de poder y se atrevan a golpear y amedrentar a los ciudadanos con el claro fin de infundir miedo e inhibir su exigencia para que se cumplan los derechos que les corresponden.
Es importante señalar, que estos actos vandálicos y violentos contra los antorchistas fueron ejercidos por un grupo de personas con toda la facha de golpeadores a sueldo, y lo más preocupante es que a este mismo grupo se les ha visto en todo acto público realizado por la alcaldesa, incluso en la propia alcaldía, como ocurrió en vísperas del festejo de la Independencia, donde se les vio resguardándose en una carpa colocada en la explanada de la alcaldía.
Es importante que estas situaciones se tomen en cuenta y la propia ciudadanía cuestione a la alcaldía y alcaldesa de Tláhuac, cómo es que estos vándalos sirven a este gobierno, quién les paga o cómo se mantienen.
No entendemos tanto odio hacia nuestra organización y a nuestros compañeros por parte de la alcaldía, si lo único que hemos hecho hasta ahora es organizar y tratar de concientizar a las masas tlahuaquenses para que conozcan sus derechos y luchen porque las autoridades los cumplan, como lo es el derecho a contar con servicios básicos en sus colonias, como el agua potable, luz eléctrica, drenaje, seguridad, y por supuesto el derecho a la vivienda.
Desde hace tiempo hemos venido gestionado ante el Gobierno de la Ciudad (que turnar la petición ante el Instituto de Vivienda) que se construya vivienda para familias humildes en esta demarcación, y para esto ya existe un proyecto por parte del INVI, que está dispuesto a adquirir un predio para su construcción, pero es necesario que la alcaldesa autorice su adquisición. Dichas viviendas serían entregadas a los beneficiarios y ellos a su vez las pagarían en abonos. Todo esto es perfectamente legal y autorizado por el gobierno central.
Sin embargo, la alcaldesa se ha venido negando a otorgar la firma de autorización, argumentando que en Tláhuac no están cubiertos todos los servicios, como el agua potable, ante esto quiero decir que es reprobable que un gobierno que aseguró en campaña que tenía la capacidad de resolver las necesidades de los tlahuaquenses, ahora salga con que no puede.
Aunado a ello, mientras les niega vivienda a familias humildes, en cambio ha autorizado la construcción de zonas residenciales de alta plusvalía, y si no creen, vayan a dar una vuelta por la avenida Guillermo Prieto en la colonia Miguel Hidalgo de esta alcaldía, para constatar que esto es real y que, para estas casas, que por cierto costarán arriba de los 5mdp, se les tienen prometidos todos los servicios, como el agua potable.
¿De qué se trata entonces? o sea, que para los ricos sí hay servicios y los pobres se queden sumidos en su pobreza y marginación.
¿Pues no que este era el gobierno de primero los pobres? Y que con él ahora sí veríamos un cambio verdadero. Denunciar esta anomalía ha generado que la alcaldesa le tenga un profundo odio a la organización social y detesta que la gente se organice y luche por sus derechos, dejando claro que preferiría que los ciudadanos estuvieran ciegos y manipulados.
Quiero dejar muy claro que esto no va a ocurrir, que Antorcha seguirá impulsando la construcción de vivienda y bienestar para los más pobres, así no les guste a los gobiernos como el de Berenice Hernández, que quisieran ver a la gente sumisa y que no se atreviera a cuestionar los malos manejos, pero con Antorcha y los antorchistas eso no va a ocurrir, pues Antorcha seguirá luchando por mejores condiciones para los ciudadanos, y entre esto incluye la vivienda, pues este es un derecho que debe ser respetado por las autoridades.
Los hechos violentos de los que mis compañeros fueron víctimas no nos van a detener ni a intimidar, porque nuestra causa es justa y urgente para sacar de la pobreza y marginación a los más humildes, porque la alcaldía junto con su alcaldesa en Tláhuac no lo van a hacer.
En los próximos días, una comisión de antorchistas acudiremos a Palacio Nacional para solicitar a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, ponga un alto al clima de hostilidad y violencia que se vive en Tláhuac y garantice la paz hacia los ciudadanos.
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