Debido a que el ex futbolista Cuauhtémoc Blanco gobernó literalmente con las patas, Claudia Sheinbaum le exigió que abandonara Morelos, pues el americanista les aporta muchos negativos a las campañas de Morena.
Hace un par de semanas, la candidata presidencial morenista le dijo al gobernador con licencia que su presencia en tierras tlahuicas estorbaba al proyecto, debido al pésimo trabajo hecho en el estado, que lo ubica en el ranking como el peor gobernador del país.
Además de las quejas de los partidos aliados en la entidad, la propia Margarita González Saravia, aspirante de la 4T a gobernadora, ha dicho que el exfutbolista es lastre para su campaña, y que, indudablemente, afecta a Morena como marca.
Ni cómo sostener el discurso de continuidad, si lo que menos quieren los morelenses es que las cosas sigan como hasta ahora. No hay manera de defender a Blanco ante sus gobernados, para los que es ya el peor gobernador en su historia.
De ser un personaje en el que incluso se llegó a pensar como probable candidato morenista a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, o de menos aspirante a senador de la República, el exfutbolista pasó a ser una pesada carga para el movimiento.
Solamente por la estima que le tiene el Presidente, quien le agradece haber acercado a su hijo al americanismo, Blanco jamás hubiera conseguido posición alguna para las próximas elecciones.
De lástima le darán una diputación federal para que tenga fuero y no lo metan a la cárcel, a pesar de las carpetas judiciales que hay en su contra, y que el gobierno federal quiso frenar con el encarcelamiento temporal del fiscal morelense Uriel Carmona.
Seguramente será diputado plurinominal, pues no quiso arriesgarse a pedir el voto en su territorio, pero Blanco deja a su equipo desprotegido, entre ellos a su medio hermano, Ulises Bravo Medina, quien se despachó con la cuchara grande.
La petición de Sheinbaum para que el gobernador con licencia se aleje del estado coincide con la llegada del exsecretario de Gobernación, Adán Augusto López, y su equipo cercano, quienes desde hace algunas semanas son los operadores de la campaña de González Saravia.
Y es que la candidata del oficialismo nomás no levanta y mucho menos entusiasma, al grado que la opositora Lucy Meza se le ha colado en las encuestas. Cada vez es más claro su ascenso, que se cruza con el descenso de Margarita.
No es que Adán Augusto esté en Morelos todos los días; de hecho casi no se aparece, pero envió a un equipo encabezado por el exsubsecretario de Gobernación, Ricardo Peralta, quien sí está a diario viendo la estrategia electoral de la candidata.
Incluso, Peralta ha estado muy activo en los medios locales, de la mano con el área de Comunicación Social del Gobierno de Morelos, que le abre espacios en los medios con los que tiene vigentes contratos de publicidad.
La contienda luce muy cerrada, pero las apuestas se empiezan a inclinar por la oposición, y por eso le pidieron a Cuauhtémoc que se alejara un rato.
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