Martín Aguilar
La senadora Claudia Ruiz Massieu, quien dirigió al PRI de julio de 2018 a agosto de 2019, confirmó lo declarado por Roberto Madrazo Pintado, en el sentido de que los expresidentes no desistirán en su demanda de que el Comité Ejecutivo Nacional que encabeza Moreno Cárdenas dé un paso al costado, ante los malos resultados obtenidos en los dos más recientes procesos electorales y los escándalos en los que está envuelto el presidente del tricolor.
«Vamos a seguir haciendo los mismos planteamientos que ya hicimos, que los hicimos con respeto, que los hicimos en un ánimo de cuidado político para nuestro partido y en un ánimo de reconocer la circunstancia y la realidad en la que estamos como instituto político, como militancia al interior, pero también de cara a la ciudadanía, que quiere que un partido como el nuestro pueda hacer un replanteamiento de sus estrategias, de sus formas, de su oferta política, para reconstruir una relación de mayor cercanía, confianza y respaldo ciudadano», explicó.
La legisladora por Guerrero dijo que la exigencia de renuncia del dirigente nacional no es una cuestión personal, sino un planteamiento que surge de la preocupación de que el PRI sea competitivo en las elecciones venideras.
«No es personal, de ninguna manera, fueron planteamientos de una agenda y de una ruta para que el partido recupere credibilidad, recupere fortaleza y recupere competitividad, porque estamos viviendo un momento de debilitamiento de nuestras perspectivas electorales y de la preferencia ciudadana para nuestro partido político», argumentó.
Recordó que hay un compromiso de convocar a una Asamblea Nacional extraordinaria para replantear el programa que el partido ofrece a la ciudadanía y a la alianza Va por México, pero también para modificar los estatutos «en los que en una asamblea hace algunos meses, se concentraron muchas facultades en el CEN y particularmente en su presidente».
Ruiz Massieu afirmó que lo que la ciudadanía quiere de los políticos y de los partidos políticos es una actitud de altura, de civilidad y de apertura para escuchar los distintos punto de vista, sin descalificaciones, «que no tienen lugar ni en un partido político plural ni en una democracia».
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