Martín Aguilar
El reto que tiene por delante la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina es humanizar la impartición de justicia y no dejar de escuchar a todas las víctimas, así como estimular la denuncia porque hay una cifra negra de los ilícitos cometidos al no quedar registrados porque la ciudadanía no acude ante la autoridad, ya sea por desconfianza o por lo tardado de los trámites, reconoció la titular de ese órgano autónomo de la Ciudad de México, Ernestina Godoy Ramos, quien aseguró que se respeta a todos los grupos de colectivas y aceptó que falta un mayor trabajo para combatir los delitos contra las mujeres.
Durante la primera sesión extraordinaria del Consejo Judicial Ciudadano (CJC), cuyos integrantes la cuestionaron en torno a su gestión, en el marco del proceso que se lleva a cabo para determinar si es ratificada por un periodo más de cuatro años, dijo que se debe mejorar la atención a la ciudadanía y detalló que hay todo un plan de política criminal alineado a lo que es la estrategia en la capital del país en materia de paz.
En la entrevista pública que le hicieron los once consejeros del organismo en el Salón Heberto Castillo del edificio sede del Congreso de la Ciudad de México, en donde afuera del mismo se manifestaron cientos de personas que la apoyan para que continúe en el cargo, expuso que se requiere emprender diversas acciones para que la ciudadanía confíe en la FGJ y una de ellas es hacer más eficiente el proceso de denuncia y se reduzca el tiempo de respuesta por parte de la autoridad.
Godoy Ramos, en la sesión que fue moderada por el presidente del CJC, Jorge Nader Kuri, consideró que pasa por el proceso de ratificación más complejo del país y que cuando llegó a la institución la encontró abandonada, con instalaciones poco dignas para el personal y para atender a las personas, así como con una Policía de Investigación sin equipamiento tecnológico y con falta de capacitación, en tano que con el pasado del tiempo se ha podido mejorar la confianza en el Ministerio Público de 29 a 38 por ciento, pero aún hay mucho que hacer en esa materia.
En su exposición inicial la fiscal detalló: “hemos actuado con total transparencia sin importar que algunas cifras no nos favorecen, porque estoy convencida que es derecho de la ciudadanía acceder a información veraz, nosotros no trabajamos para las estadísticas, trabajamos para la justicia”.
Refirió que era impostergable combatir la impunidad para recuperar la confianza de los ciudadanos, por lo que se puso especial atención en las órdenes de aprehensión rezagadas y ahora, personas que delinquieron hasta hace más de 20 años, llevan su proceso desde los reclusorios, mientras que a la fecha se han cumplimentado 23 mil 279 órdenes de aprehensión.
“No soy una mujer que eluda las responsabilidades, creo que la justicia no solo es una obligación del Estado, es un derecho y un valor esencial de la democracia. Por ello he buscado que las acciones de la fiscalía sean consecuentes con esto, que las carpetas de investigación sean fuertes, robustas, nuestros ministerios públicos se han convertido y los fiscales en verdaderos tribunos que defienden las pruebas sin importar quién sea la persona imputada”, delineó la responsable de la FGJ.
Mientras que afuera del Congreso continuaban las manifestaciones a favor y en el salón en donde se llevó la sesión de escuchan las consignas dirigidas a apoyarla, Ernestina Godoy ante los consejeros que le hicieron varios cuestionamientos, precisó que se han conseguido sentencias igual para diputados que para servidores públicos de todos los niveles, así como empresarios, líderes de partidos políticos y generadores de violencia; “no he dudado para tomar decisiones sin temor a las implicaciones que en muchos casos han querido llevar al terreno de la política”.
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