Rebeca Marín
El gobierno federal analiza las opciones que tiene para liquidar la deuda que tiene con los bonistas del que sería el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), antes de ceder el control del aeropuerto capitalino, fuente de ingresos para este pago, a la Marina.
El subsecretario de Transportes de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), Rogelio Jiménez Pons, dijo que una opción es que la deuda se liquide en un solo pago.
La deuda del gobierno federal a los bonistas por la cancelación del NAIM asciende a unos cuatro mil 200 millones de dólares, la cual estaba comprometida a pagar hacia el año 2047.
Los recursos para el pago de esta deuda salían de los ingresos del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) por concepto de Tarifa de Uso Aeroportuario (TUA).
Sin embargo, el gobierno cederá el control de la terminal capitalina a la Secretaría de Marina mediante un acuerdo, por lo que la TUA será administrada por la dependencia armada.
Jiménez Pons dijo que una vez que esto suceda, será la Marina la que decida a dónde destina los ingresos de la TUA, que puede ser a las jubilaciones de elementos y al mantenimiento del AICM.
No obstante, dejó en claro que la Secretaría de Hacienda trabaja para determinar y asegurar el pago de la deuda a los bonistas.
«Hay que darles garantías de que los bonos están seguros, que se va a cumplir con las obligaciones», aseveró.
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