El encuentro “Unidad y Gobiernos de Coalición” se convirtió en una caja de resonancias de los principales problemas del país.
Pero cobró especial relevancia la ponencia del ex director del CISEN, Guillermo Valdés Castellanos, quien prendió las alertas en materia de seguridad.
Vaticinó un verdadero baño de sangre al final del presente sexenio, el cuál estima que culminará con 220 mil asesinatos, que derivarán en 500 mil familias enlutadas.
Pasarán tres sexenios para reconstruir el sistema de seguridad y justicia en el país, tras la estela de odio y violencia de la 4T.
Como ejemplo de ello, es que cada 24 horas son asesinadas en México 95 personas, entre las que se encuentran alrededor de 10 o 12 mujeres.
Además, todos los días desaparecen 25 personas; y en el presente sexenio se han descubierto 3 mil fosas clandestinas.
Cada año se cometen 30 millones de delitos, de los cuales sólo entre el 6% y 8% son denunciados.
Las procuradurías estatales se han convertido en un hoyo negro, toda vez que sólo existen 12 mil ministerios públicos para atender todo ese caudal de denuncias.
Para Valdés Castellanos –especialista en seguridad nacional-, es una falacia la política de “abrazos, no balazos”.
Con ello –alertó- se empoderó a las bandas del crimen organizado. Se convirtieron en verdaderos depredadores de la seguridad pública.
Además, la mafia convirtió a la industria de la extorsión en un moderno Sistema de Administración Tributaria (SAT).
Es decir que mediante la extorsión y cobro de derecho de piso, el crimen organizado se empoderó y capturó a las instituciones para ponerlas a su servicio.
La herencia del presente gobierno –enfatizó- es una sociedad con miedo, donde hay miles de familias desprotegidas. “Es un legado temible y un retroceso brutal”.
Para reconstruir todo lo anterior, se tendrá que destinar el triple del presupuesto actual en la materia, precisó.
Pero además, se deberá impulsar una batería de reformas para presentar denuncias, con el fin de que los 400 mil policías del país también las reciban.
El sistema carcelario también tendrá que ser reformado, puesto que las prisiones son generadoras de una importante cantidad de delitos.
Es por demás aterrador el panorama, ante la fallida política contra la inseguridad.
Por eso, el especialista recomendó a los aspirantes de la oposición comprometerse a firmar un acuerdo nacional para evitar que el crimen organizado intervenga en los procesos electorales.
Discussion about this post