Martín Aguilar
Al encabezar una misa en la Basílica de Guadalupe a 87 meses del caso Iguala, el Obispo emérito Raúl Vera culpó a los tres órdenes de Gobierno por la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
Al cumplirse 7 años y 3 meses de la desaparición de sus hijos, los familiares de los estudiantes marcharon desde la Glorieta de Peralvillo a la Basílica de Guadalupe.
«Los principales responsables de la desaparición de sus hijos son: el Gobierno de Guerrero, el Gobierno de los municipios donde se dio este crimen y el Gobierno federal, porque estaba en medio el Ejército mexicano», expresó Vera.
La misa se ofreció en el exterior del templo mariano, con el Obispo en uno de los balcones del edificio con las imágenes de la Virgen María y San Juan Diego, y donde fueron colocadas mantas con los rostros de los normalistas.
En su mensaje, Raúl Vera reivindicó la labor del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), pues dijo que dejaron aclarada la responsabilidad de las autoridades.
«Las autoridades, empezando por las autoridades civiles, las autoridades también militares de la zona, estaban al tanto de lo que estaba pasando y cómo se estaba desarrollando», agregó.
El religioso pidió a la Virgen de Guadalupe que las autoridades mexicanas «hagan lo que tengan que hacer y no le estén dando vueltas al asunto».
En su camino a la Basílica, los padres y las madres de los normalistas demandaron al Ejército dar toda la información que tienen del caso y al Presidente Andrés Manuel López Obrador cumplir con su promesa de llegar a la verdad de lo ocurrido.
A la Fiscalía General de la República le reclamaron celeridad en la investigación.
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