Rebeca Marín
Una derrama económica de 2 mil 500 millones de pesos dejó la pasada Semana Santa en el sector restaurantero del Estado de México, con un flujo de visitantes similares a los que se tenían hasta antes de la pandemia, afirmó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados de la entidad, Alejandro Rayón Montes de Oca.
Al dar a conocer un balance de lo obtenido en el periodo de la llamada Semana Mayor en el territorio mexiquense, el dirigente del sector manifestó que, si bien se lograron alcanzar cifras como las de 2019, la utilidad o el beneficio directo se vieron mermadas por la inflación.
Indicó que mejoró mucho la afluencia de visitantes, principalmente en los municipios con vocación turística, como Valle de Bravo, Malinalco, Ixtapan de la Sal y Tonatico, por mencionar algunos sitios.
“En los lugares turísticos si llegamos a números de visitantes similares al 2019, pero el tema de utilidad o beneficio directamente al sector ha sido mermado principalmente por la inflación, gran parte de los visitantes cuida mucho su ticket promedio”, dijo.
Asimismo, comentó que el empresario del sector restaurantero se ha amarrado las manos en subir los precios, representando o simbolizando realmente lo que tendría que ser y tratar de mantener el número de visitantes.
Explicó que esta situación ha agudizado el fenómeno que ellos conocen como las “empresas zombies”, que son aquellas en números rojos y que prácticamente están muertas y solo están esperando tener las condiciones para traspasar el negocio o de plano encontrar las condiciones para bajar las cortinas.
Dijo que ciertamente esta temporada ha permitido una recuperación importante para los restauranteros, al recuperar ingresos, a pesar de los impactos de la inflación, pero también existe preocupación porque existe un gran número de “empresas zombies”.
“Todavía tenemos varias empresas zombis que ya están muertas y solo están esperando poder traspasar el changarro o encontrar las condiciones para bajar cortinas, el ticket promedio que traemos depende del sector, por lo general en un nivel Premium, estamos hablando de 350 a 450 en el sector restaurantero, en súper Premium está de 550 a terminar, y en el tema de los informales es de 250 para abajo”, reveló Alejandro Rayón Montes de Oca.
En ese sentido, expresó su preocupación por que el sector sigue lastimado y dijo que las «empresas zombies” representan alrededor de un 15%, las cuales están a punto de cerrar porque sus costos se ubican un 20% arriba de lo que registraron en 2019.
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