Rebeca Marín
Esta semana un juez federal ordenó la aprehensión de la conductora peruana Laura Bozzo. Además, la Fiscalía General de la República solicitó a la Oficina de la Policía Internacional (Interpol) girar una ficha roja contra Bozzo; con esto, la conductora será buscada en 190 países.
El pasado 11 de agosto el juez Daniel Ramírez Peña del Centro de Justicia Penal Federal de Almoloya de Juárez ordenó a Bozzo que se entregara en el Penal Estatal de Santiaguito. La conductora contaba con un plazo de 48 horas; sin embargo, no se presentó.
La semana pasada se dio a conocer que la conductora fue vinculada a prisión preventiva, por la defraudación fiscal por 13 millones de pesos.La presentadora es acusada del delito fiscal conocido como depositaria infiel, ya que vendió una propiedad embargada por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) que garantizaba el pago de una deuda de más de 13 millones de pesos; al no acreditar su domicilio oficial se le dictó prisión preventiva, puesto que se consideró que podía fugarse.
El 12 de agosto, Bozzo presentó un amparo ante un juez federal para suspender la orden de aprehensión. Según su defensa padece de enfisema pulmonar y es una persona de la tercera edad al tener 70 años, por lo que estar en prisión puede poner en riesgo su vida.
Sin embargo, un juez federal decidió no otorgar el amparo de Bozzo contra la orden de aprehensión e internamiento voluntario a prisión. El juez turnó la demanda de amparo a un juzgado de Toluca.
El juez René Ramos Pérez, Juez Décimo de Distrito en el Estado de México en Naucalpan se declaró incompetente para llevar el juicio, ya que la orden de aprehensión fue dictada por un juez de Almoloya de Juárez, un municipio más cercano a Toluca.
Ramos Pérez también rechazó el amparo porque Bozzo lo presentó el 12 de agosto; es decir, un día antes de que se girara la orden de aprehensión.
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