Rebeca Marín
La Industria de Distribución de GAS LP manifestó preocupación por la situación de grave de inseguridad que existe en el país, pues esta materia se ha convertido en un producto muy codiciado por la delincuencia organizada, lo que afecta a las familias más vulnerables, así como a las colonias y barrios, a los consumidores y a la sociedad en general.
A través de un comunicado señalan que la delincuencia lo roba de los ductos de Pemex para distribuirlo de manera ilícita, mediante equipos y procedimientos que ponen en grave riesgo a los consumidores y a sus familias.
Asociación de distribuidores de Gas LP, ADIGAS, AMEXGAS, y la Cámara Nacional del Gas, señalan que el impacto negativo de este delito se manifiesta distintas formas:
1.-La mayor parte de la distribución del GAS LP robado se hace utilizando Autotanques, camionetas de recipientes portátiles, cilindros y Transportes que han sido robados a los Distribuidores formales y posteriormente son clonados, así también como utilizando equipo de reparto hechizos que no reúnen las normas de seguridad en su fabricación.
2.-En los grandes centros de consumo, es frecuente el control territorial de grupos de choque y la imposición de condiciones de venta abusivas, que afectan a la población e impactan su economía.
3.-La presencia de grupos delincuenciales en barrios y colonias incrementa la existencia de acciones ilícitas, ampliando el número de delitos y perjudicando a la población.
4.-La creciente participación de grupos de choque que amenazan y extorsionan a comercios establecidos, obligándolos a comprar el gas ilícito.
5.-La violencia física y agresiones a choferes repartidores y concesionarios que distribuyen en las zonas populares de centros urbanos, son cada día más frecuentes.
6.-Es grave el daño a las instalaciones, ductos y finanzas de Pemex, a quien roban su patrimonio y crean situaciones de alta peligrosidad como las que desafortunadamente se han presentado ocasionando explosiones y decenas de heridos y muertes.
7.-El clima de inseguridad, incertidumbre y de falta de respeto a la ley, crea en todos los niveles de la sociedad angustia e impotencia.
El robo de gasLP tiene una afectación económica y de seguridad a las instalaciones a PEMEX, así como para los consumidores, y un desplazamiento de los trabajadores formales que pierden sus empleos ant ela creciente presencia de la distribución ilícita.
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