Rebeca Marín
El Banco de México (Banxico) redujo las expectativas para el crecimiento de la economía mexicana en 2021, debido al recrudecimiento de la pandemia de Covid-19.
La autoridad bajó de 6.2% a 5.4% su proyección para este año, la subió de 3.2% a 3.0% para 2022 y estableció una expectativa de 2.7% para 2023.
La revisión para 2021 responde, principalmente, a un desempeño del Producto Interno Bruto (PIB) por debajo de lo anticipado entre julio y septiembre, lo cual se puede asociar con el recrudecimiento del Covid-19.
También contribuyó el menor gasto en servicios de apoyo a negocios por la transición a la nueva regulación en subcontratación laboral.
El banco central anticipa que la actividad económica retome un ritmo de crecimiento a finales del año, por una expansión de la actividad industrial de Estados Unidos, avances en la campaña de vacunación y la gradual disminución del número de contagios por Covid-19.
No obstante, considera que la economía mexicana continuará enfrentando un entorno complejo, pues se espera que prevalezcan varios cuellos de botella en la producción, así como incertidumbre global en torno a la evolución de la pandemia y la aparición de nuevas variantes del virus.
Analistas consultados por Banxico subieron su previsión de inflación de 6.6% a 7.2% para el cierre de año, un máximo en más de dos décadas. Para el próximo año elevaron su pronóstico de 3.8% a 4.0%, mientras que para 2023 la revisaron de 3.5% a 3.6%.
Los especialistas señalan, como limitantes para la actividad económica, el aumento en el precio de los insumos y materias primas, las presiones inflacionarias y los elevados costos salariales.
Entre los principales frenos para los negocios indicaron, en primer lugar, el crimen, la falta de Estado de derecho, la corrupción y la dominancia de las empresas existentes.
Discussion about this post